Citas Biblicas referente a Purificación Salmos 51:1-2 - Dios habla hoy (DHH94I)
-
¡Lávame de mi maldad! ¡Límpiame de mi pecado!
Reconozco que he sido rebelde; mi pecado no se borra de mi mente.
Contra ti he pecado, y solo contra ti, haciendo lo malo, lo que tú condenas. Por eso tu sentencia es justa; irreprochable tu juicio.
En verdad, soy malo desde que nací; soy pecador desde el seno de mi madre.
En verdad, tú amas al corazón sincero, y en lo íntimo me has dado sabiduría. Purifícame con hisopo, r*y quedaré limpio; lávame, y quedaré más blanco que la nieve. Lléname de gozo y alegría; alégrame de nuevo, aunque me has quebrantado.
Aleja de tu vista mis pecados y borra todas mis maldades.
Oh Dios, ¡pon en mí un corazón limpio!, ¡dame un espíritu nuevo y fiel!
No me apartes de tu presencia ni me quites tu santo espíritu.
Hazme sentir de nuevo el gozo de tu salvación; sosténme con tu espíritu generoso,
para que yo enseñe a los rebeldes tus caminos y los pecadores se vuelvan a ti.
Líbrame de cometer homicidios, oh Dios, Dios de mi salvación, y anunciaré con cantos que tú eres justo.
Señor, abre mis labios, y con mis labios te cantaré alabanzas.
Pues tú no quieres ofrendas ni holocaustos; yo te los daría, pero no es lo que te agrada.
Las ofrendas a Dios son un espíritu dolido; ¡tú no desprecias, oh Dios, un corazón hecho pedazos!
Haz bien a Sión, por tu buena voluntad; vuelve a levantar los muros de Jerusalén.
Entonces aceptarás los sacrificios requeridos, las ofrendas y los holocaustos; entonces se ofrecerán becerros sobre tu altar.
Versículo del día
Jesús respondió, y le dijo: Si alguno me ama, guardará mi palabra; y mi Padre lo amará, y vendremos a él, y haremos con él morada.
Juan 14:23 (LBLA)Otras versionesir al Inicio ›Este proyecto ha sido desarrollado por a1 Desarrollo WebUtilizamos cookies para asegurar que damos la mejor experiencia al usuario en nuestro sitio web. Si continúa utilizando este sitio asumiremos que estás de acuerdo. De acuerdo