II Crónicas 18:1-34 RVR95

II Crónicas 18:1-34

Micaías profetiza la derrota de Acab

1 Tení­a, pues, Josafat riquezas y gloria en abundancia; y emparentó con Acab.

2 Después de algunos años descendió a Samaria para visitar a Acab, por lo que Acab mató muchas ovejas y bueyes para él y para la gente que con él vení­a, y le persuadió que fuera con él contra Ramot de Galaad.

3 Y dijo Acab, rey de Israel, a Josafat, rey de Judá: --¿Quieres venir conmigo contra Ramot de Galaad? Él respondió: --Yo soy como tú, y mi pueblo como tu pueblo; iremos contigo a la guerra.

4 Además dijo Josafat al rey de Israel: --Te ruego que consultes hoy la palabra de Jehová.

5 Entonces el rey de Israel reunió a cuatrocientos profetas y les preguntó: --¿Iremos a la guerra contra Ramot de Galaad, o me estaré quieto? Le respondieron: --Sube, porque Dios los entregará en manos del rey.

6 Pero Josafat dijo: --¿Hay aún aquí­ algún profeta de Jehová, para que por medio de él consultemos?

7 El rey de Israel respondió a Josafat: --Aún hay aquí­ un hombre por medio del cual podemos preguntar a Jehová; pero yo lo aborrezco, porque nunca me profetiza cosa buena, sino siempre mal. Es Micaí­as hijo de Imla. Respondió Josafat: --No hable así­ el rey.

8 Entonces el rey de Israel llamó a un oficial y le dijo: --Haz venir enseguida a Micaí­as hijo de Imla.

9 El rey de Israel y Josafat, rey de Judá, estaban sentados cada uno en su trono, vestidos con sus ropas reales, en la plaza junto a la entrada de la puerta de Samaria, y todos los profetas profetizaban delante de ellos.

10 Y Sedequí­as hijo de Quenaana se habí­a hecho cuernos de hierro, y decí­a: "Así­ ha dicho Jehová: Con estos acornearás a los sirios hasta destruirlos por completo".

11 De esta manera profetizaban también todos los profetas, diciendo: "Sube contra Ramot de Galaad y serás prosperado; porque Jehová la entregará en manos del rey".

12 El mensajero que habí­a ido a llamar a Micaí­as le habló diciendo: --Mira que las palabras de los profetas a una voz anuncian al rey cosas buenas; yo, pues, te ruego que tu palabra sea como la de uno de ellos, que hables bien.

13 Dijo Micaí­as: --Vive Jehová, que lo que mi Dios me diga, eso hablaré. Luego se presentó al rey,

14 y el rey le dijo: --Micaí­as, ¿iremos a pelear contra Ramot de Galaad, o debo desistir? Él respondió: --Subid y seréis prosperados, pues serán entregados en vuestras manos.

15 El rey le dijo: --¿Hasta cuántas veces te conjuraré que no me hables sino la verdad en nombre de Jehová?

16 Entonces Micaí­as dijo: --He visto a todo Israel disperso por los montes como ovejas sin pastor y Jehová ha dicho: "Estos no tienen señor; vuélvase cada uno en paz a su casa".

17 El rey de Israel dijo a Josafat: --¿No te habí­a yo dicho que no me profetizarí­a bien, sino mal?

18 Entonces Micaí­as dijo: --Oí­d, pues, palabra de Jehová: Yo he visto a Jehová sentado en su trono, y todo el ejército de los cielos estaba a su mano derecha y a su izquierda.

19 Y preguntó Jehová: "¿Quién inducirá a Acab, rey de Israel, para que suba y caiga en Ramot de Galaad?" Y el uno decí­a de una manera, y el otro decí­a de otra.

20 Entonces salió un espí­ritu que se puso delante de Jehová y dijo: "Yo lo induciré". Y Jehová le dijo: "¿De qué modo?"

21 Él respondió: "Saldré y seré espí­ritu de mentira en la boca de todos sus profetas". Jehová dijo: "Tú lograrás engañarlo. Anda y hazlo así­".

22 Y ahora Jehová ha puesto espí­ritu de mentira en la boca de estos tus profetas; pues Jehová ha hablado el mal contra ti.

23 Entonces Sedequí­as hijo de Quenaana se le acercó y golpeó a Micaí­as en la mejilla, diciendo: --¿Por qué camino se ha ido de mí­ el espí­ritu de Jehová para hablarte a ti?

24 Micaí­as respondió: --Tú mismo lo verás el dí­a en que vayas escondiéndote de habitación en habitación.

25 Entonces el rey de Israel dijo: --Tomad a Micaí­as y llevadlo a Amón, gobernador de la ciudad, y a Joás, hijo del rey,

26 y decidles: "El rey ha dicho así­: Poned a este en la cárcel y sustentadle con pan de aflicción y agua de angustia, hasta que yo vuelva en paz".

27 Micaí­as dijo: --Si tú vuelves en paz, no ha hablado Jehová por mí­. Dijo además: --Oí­d, pueblos todos.

28 Subieron, pues, el rey de Israel, y Josafat, rey de Judá, a Ramot de Galaad.

29 Y dijo el rey de Israel a Josafat: --Yo me disfrazaré para entrar en la batalla, pero tú ví­stete con tus ropas reales. Se disfrazó el rey de Israel y entró en la batalla.

30 El rey de Siria, por su parte, habí­a ordenado a los capitanes de los carros que tení­a consigo: "No peleéis con chico ni con grande, sino sólo con el rey de Israel".

31 Cuando los capitanes de los carros vieron a Josafat, dijeron: "Este es el rey de Israel. Y lo rodearon para pelear; pero Josafat clamó y Jehová lo ayudó, apartándolos Dios de él;

32 pues al ver los capitanes de los carros que no era el rey de Israel, desistieron de acosarle.

33 Pero un hombre disparó el arco al azar e hirió al rey de Israel entre las junturas de la coraza. El rey dijo entonces al cochero: --Vuelve las riendas y sácame del campo, porque estoy mal herido.

34 Pero arreció la batalla aquel dí­a, por lo que el rey de Israel se mantuvo en pie en su carro frente a los sirios hasta la tarde; y murió al ponerse el sol.

II Crónicas
(2 Cr. 18:1-34)

Su abreviatura es 2 Cr. (Antiguo Testamento), pertenece al tipo de libros Libros históricos. Hace referencia a acontecimientos importantes.

Capítulo 18 del libro II Crónicas (2 Cr.) - Biblia versión Reina Valera 1995 (RVR95)

Versículo del día

y se humilla mi pueblo sobre el cual es invocado mi nombre, y oran, buscan mi rostro y se vuelven de sus malos caminos, entonces yo oiré desde los cielos, perdonaré su pecado y sanaré su tierra.

II Crónicas 7:14 (LBLA)