II Reyes 19:1-37 RVR95

II Reyes 19:1-37

Judá es librado de Senaquerib

1 Cuando el rey Ezequí­as lo oyó, rasgó sus vestidos, se cubrió con vestiduras ásperas y entró en la casa de Jehová.

2 Y envió a Eliaquim, el mayordomo, a Sebna, el escriba, y a los ancianos de los sacerdotes, cubiertos de ropas ásperas, a ver al profeta Isaí­as hijo de Amoz,

3 para que le dijeran: "Así­ ha dicho Ezequí­as: "Este dí­a es dí­a de angustia, de reprensión y de blasfemia, porque los hijos están a punto de nacer y la que da a luz no tiene fuerzas.

4 Quizá oirá Jehová, tu Dios, todas las palabras del copero mayor, a quien el rey de los asirios, su señor, ha enviado para blasfemar contra el Dios viviente y para insultar con palabras, las cuales Jehová, tu Dios, ha oí­do. Por tanto, eleva una oración por el remanente que aún queda"".

5 Cuando los siervos del rey Ezequí­as llegaron a ver a Isaí­as,

6 este les respondió: "Así­ diréis a vuestro señor: Así­ ha dicho Jehová: "No temas por las palabras que has oí­do, con las cuales han blasfemado contra mí­ los siervos del rey de Asiria.

7 Mira, voy a poner en él un espí­ritu, oirá un rumor, se volverá a su tierra y allí­ le haré caer a espada"".

8 El copero mayor regresó y se encontró al rey de Asiria combatiendo contra Libna, pues oyó que se habí­a ido de Laquis.

9 Allí­ el rey de Siria se enteró de que Tirhaca, rey de Etiopí­a, habí­a salido para hacerle guerra, y volvió a enviar embajadores a Ezequí­as diciendo:

10 "Así­ diréis a Ezequí­as, rey de Judá: "Que no te engañe el Dios en quien tú confí­as, diciéndote: Jerusalén no será entregada en manos del rey de Asiria.

11 Has oí­do lo que han hecho los reyes de Asiria a todas las tierras que han destruido. ¿Vas a escapar tú?

12 ¿Acaso libraron sus dioses a las naciones que mis padres destruyeron, esto es, a Gozán, Harán, Resef, y a los hijos de Edén que estaban en Telasar?

13 ¿Dónde está el rey de Hamat, el rey de Arfad, y el rey de la ciudad de Sefarvaim, de Hena y de Iva?""

14 Ezequí­as tomó la carta de manos de los embajadores. Después de leerla subió a la casa de Jehová y la extendió delante de Jehová.

15 Entonces oró Ezequí­as delante de Jehová diciendo: "Jehová, Dios de Israel, que moras entre los querubines, solo tú eres Dios de todos los reinos de la tierra. Tú hiciste el cielo y la tierra.

16 Inclina, Jehová, tu oí­do y oye; abre, Jehová, tus ojos y mira. Oye las palabras que Senaquerib ha enviado a decirme para blasfemar contra el Dios viviente.

17 Es verdad, Jehová, que los reyes de Asiria han destruido las naciones y sus tierras,

18 y que han echado al fuego a sus dioses, por cuanto ellos no eran dioses, sino obra de manos humanas, de madera o de piedra, y por eso los destruyeron.

19 Ahora, pues, Jehová, Dios nuestro, sálvanos, te ruego, de sus manos, para que sepan todos los reinos de la tierra que solo tú, Jehová, eres Dios".

20 Entonces Isaí­as hijo de Amoz envió a decir a Ezequí­as: "Así­ ha dicho Jehová, Dios de Israel: He oí­do lo que me pediste acerca de Senaquerib, rey de Asiria.

21 Esta es la palabra que Jehová ha pronunciado acerca de él: "La virgen, hija de Sión, te menosprecia, se burla de ti; a tus espaldas mueve su cabezala hija de Jerusalén.

22 ¿A quién has insultadoy contra quién has blasfemado?, ¿contra quién has alzado la voz, y levantado altanero tus ojos? Contra el Santo de Israel.

23 Por medio de tus mensajeros has insultado a Jehová y has dicho: Con la multitud de mis carros ptab he subido a las alturas de los montes, ptab a lo más inaccesible del Lí­bano; ptab cortaré sus altos cedros, ptab sus cipreses más escogidos; ptab me alojaré en sus más remotos lugares, ptab en el bosque de sus feraces campos.

24 He cavado y bebido las aguas extrañas, he secado con las plantas de mis pies todos los rí­os de Egipto.footnote rnd=893127101 idx=15 b19.23-24/b Los icedros/i del iLí­bano/i (véanse

25 ¿Pero nunca oí­ste quedesde tiempos antiguos yo lo hice, y que desde los dí­as de la antig@uedadlo tengo ideado? Pues ahora lo he hecho venir: Tú causarás desolaciones, y reducirás las ciudades fortificadasa montones de escombros.

26 Sus habitantes, impotentes, fueron acobardados y confundidos; vinieron a ser como la hierba del campo, como hortaliza verde, como heno de los terrados, que se marchita antes de madurar.

27 He conocido tu situación, todos tus movimientos, y tu furor contra mí­.

28 Por cuanto te has airado contra mí­, por cuanto tu arroganciaha subido a mis oí­dos, voy a poner mi garfio en tu nariz y mi freno en tus labios, y te haré volver por el caminopor donde viniste.

29 "Esto te daré por señal, Ezequí­as: Este año comeréis lo que nacerá de suyo, y el segundo año lo que nacerá de suyo. Al tercer año sembraréis y segaréis, plantaréis viñasy comeréis el fruto de ellas.

30 Lo que haya escapado, lo que haya quedado de la casa de Judá, volverá a echar raí­ces por debajo y llevará frutos por arriba.

31 Porque de Jerusalén saldrá un resto, y del monte Sión los que se salven. El celo de Jehová de los ejércitos hará esto.

32 "Por tanto, así­ dice Jehováacerca del rey de Asiria: No entrará en esta ciudad, ni lanzará flechas en ella; ni la enfrentará con escudo, ni levantará contra ella un baluarte.

33 Por el mismo camino que vino, volverá, y no entrará en esta ciudad, dice Jehová.

34 Porque yo ampararé esta ciudadpara salvarla, por amor a mí­ mismo, y por amor a David, mi siervo"".

35 Aconteció que aquella misma noche salió el ángel de Jehová y mató en el campamento de los asirios a ciento ochenta y cinco mil hombres. A la hora de levantarse por la mañana, todo era cuerpos de muertos.

36 Entonces Senaquerib, rey de Asiria, partió y regresó a Ní­nive, donde se quedó.

37 Y aconteció que mientras él adoraba en el templo de Nisroc, su dios, sus hijos Adramelec y Sarezer lo hirieron a espada y huyeron a tierra de Ararat. En su lugar reinó Esar-hadón, su hijo.

II Reyes
(2 R. 19:1-37)

Su abreviatura es 2 R. (Antiguo Testamento), pertenece al tipo de libros Libros históricos. Hace referencia a acontecimientos importantes.

Capítulo 19 del libro II Reyes (2 R.) - Biblia versión Reina Valera 1995 (RVR95)

Versículo del día

y si mi pueblo, el pueblo que lleva mi nombre, se humilla,ora, me busca y deja su mala conducta, yo lo escucharé desde elcielo, perdonaré sus pecados y devolveré la prosperidad a supaí­s.

II Crónicas 7:14 (DHH94I)